No siempre fui la mujer fuerte y apasionada que soy hoy. Revisando el cajón donde guardo mis diarios y viejas libretas de apuntes, encontré una que contiene mis quebraderos de cabeza de otra época, en la que sólo era una criatura de la costumbre. Alguien capaz de convivir con una pareja abusiva… un hombre hecho de disciplina militar, de intolerancia, de odio, de resentimiento, de amargura, de tedio.
Leyéndola me preguntaba: ¿Por qué me mantenía al margen del riesgo y renunciaba a